FIN DEL MUNDO (XXIV) by Víktor Valles

Al fin ha llegado el día deseado; viernes.

Que multitud de sentimientos, expectativas, planes y demás se agolpan para describir un día concreto.

Aunque hoy…

…es todavía más emocionante.

¿Por qué?

Sencillo.

¿Recordáis que un chico llamado Víktor Valles ganó el premio “Yo sobreviví al fin del mundo”?

Hoy lo conoceremos un poquito más y, como muchos deseáis, echaremos un vistazo al inicio de su relato (genial).

Disfrutadlo y feliz viernes, Soñadores.

Víktor Valles

¿Quién es? 

Barcelona, 1984. Bloguero, creativo y escritor. Ha participado en antologías como +Relatos +Autores, El Laberinto de los Siglos, Relatos de Misterio y Susurros de Invierno. Actualmente compagina sus labores literarias participando como co-administrador del blog Almas de Viento y colaborando como creativo en The Black Catz - Creative Company.

Así comienza su relato:

<< Último día.

            Despertó como en una jornada cualquiera. Se deshizo de las sábanas y se incorporó sin cavilarlo, acto seguido se dirigió al baño. Observó su rostro reflejado en el espejo, las ojeras se hacían cada vez más notables y -en general- su faz se mostraba más demacrada que de costumbre.

            Sam recordó por un instante la celebración de su treinta cumpleaños. Lo había festejado en la mesa que ahora reposaba en el vacío comedor acompañado por su gato: Kafka. Se había propuesto muchas cosas, como si fuera año nuevo, pero en el fondo sabía que no cumpliría ninguna: solamente deseaba terminar con todo.  Y en ello pensaba mientras la cuchilla de afeitar acariciaba su cuello.>>

Y ahora en catalán:

Víktor Valles

Qui és?

Barcelona, 1984. Blocaire, creatiu i escriptor. Ha participat en antologies com +Relatos +Autores, El Laberinto de los Siglos, Relatos de Misterio i Susurros de Invierno. Actualment compagina la feina de casa literàries participant com co-administrador del bloc Ànimes de Vent i col · laborant com creatiu a The Black Catz - Creative Company.

Així comença el seu relat:

<< L’últim dia

Va despertar com en una jornada qualsevol. Va desfer-se dels llençols i va incorporar-se sense pensar-ho. Tot seguit va dirigir-se cap al lavabo. Va observar el seu rostre en el mirall, les orelles es feien cada cop més notables i, en general, la seva cara es mostrava més demacrada que de costum.

En Sam va recordar per un instant la celebració del seu trentè aniversari. L’havia festejat a la taula que ara restava a l’estança buida, acompanyat pel seu gat: Kafka. S’havia proposat moltes coses, com si fos any nou, però en el fons sabia que no n’acompliria cap. Només desitjava acabar amb tot. I era allò el que pensava mentre la fulla d’afaitar acaronava el seu coll.>>